Una persona muy especial me dijo citando a un grande “La vida no es lo que uno vivió sino lo que uno recuerda para contarlo”. Creo esta frase aplica a la perfección para el gran viaje que hizo el Motoso desde León a Durango y de regreso, casi sin planearlo y originado por una conversación en el mensajero un día atrás.
No quiero platicar los antecedentes de esta rodada, esta vez le corresponde al Motoso en su relato narrar los detalles si así le apetece. Yo sólo contaré un poco de lo que viví en su visita a tierras durangueñas. ¡El primer MotoRutero que rueda por suelo durangueño! Son las 5:05pm de un sábado y espero afuera de un supermercado la llegada de un amigo que viene desde el estado de Guanajuato en su Honda NXR 150 Bros. Hace un clima frío, nublado, las calles están mojadas pero ya no tan resbalosas como horas antes. No se ven motociclistas además de los típicos repartidores. Los banqueteros y demás han decidido en su sano juicio dejar las dos ruedas en casa. Sólo un motociclista, un “survivor” mas ha decidido viajar desde tan lejos para conocer nuevas carreteras, conocer nuevos lugares.
A las 5:37pm se aproxima hacia mi por el boulevard una fuerte luz solitaria, conforme se acerca veo que la acompaña la silueta de mi amigo y lo compruebo cuando me saluda desde su lugar tras el semáforo en rojo. Al comprobar que está en mi ciudad de pronto no lo creo, ya había amenazado con visitarme hace unos meses pero por diversas circunstancias no se había concretado, me da mucho gusto y veo que viene con mucho frío por el camino, la lluvia, llovizna, neblina, etc. Nos dirigimos primero a las Gorditas que se ubican junto a la Facultad de Medicina de la UJED para que las pruebe y pueda saciar su hambre ya que ya era un poco tarde.
Luego vamos a mi casa para que se de un buen baño caliente, descanse un poco y ya en la noche vamos a dar un recorrido por algunos sitios de interés turístico. Visitamos el Mirador del Cerro de los Remedios, la iglesia de Nuestra Señora de los Remedios, Plaza Cuarto Centenario, Palacio de Gobierno, templo de San Agustín, Teatro Ricardo Castro, Plaza de Armas, Catedral Basílica Menor y la Estación de Ferrocarril con la compañía de un cada vez más fuerte frío. Aunque al Almighty no le guste jaja, debo pedir disculpas al Motoso por no haber investigado al menos un poco de la historia de los sitios que le mostré. Ya hace tiempo vengo aplazando una rodada banquetera y finalmente la hice con el. Bastante improvisada pero ojalá le haya gustado nuestra tranquila y callada ciudad colonial.
Luego de cenar unos buenos tacos nos fuimos a descansar pues al día siguiente él quería regresar temprano pues el camino era largo. Yo hubiese querido llevarlo a conocer un poco de los alrededores de la ciudad, sobre todo la sierra, pero bueno, eso queda pendiente para otra rodada.
Son las 7:45am del domingo, estamos calentando las motos fuera de mi casa. Tengo planeado acompañar a Motoso hasta Sombrerete, Zac. El clima es frío, muy frío y por si esto fuera poco hay una neblina muy densa. De inmediato viene a mi mente el recuerdo de la última rodada a Mazatlán… Por un momento cruza por mis pensamientos desistir en mis planes y pensé en sólo acompañarlo a la salida de Durango, pero bueno, finalmente las ganas de salir pudieron más… Apenas vamos tomando la carretera a Zacatecas y de inmediato se nota que la neblina nos acompañará por buen rato. No se si es mi imaginación, pero en los arroyos que cruzan a la altura de la planta tratadora de aguas residuales veo que el agua está congelada, al menos la sensación térmica nos indica que estamos circulando bajo 0ºC… De nueva cuenta voy batallando con la mica de mi casco, quitándole la humedad con los guantes, evitando que mis lentes se impregnen también, pero apenas a la altura del Instituto Tecnológico de Montemorelos o un poco después me tengo que detener a secarme los lentes.
Pasamos Industrias Centauro y por un momento parece que el sol va a salir entre la neblina, así lo hace por unos instantes pero de inmediato se oculta de nuevo. En la desviación a Los Berros de nueva cuenta la neblina cede un poco y estamos rodando en un tramo totalmente despejado, incluso se alcanza a ver la neblina por la que acabamos de pasar, Motoso se detiene a tomar algunas fotografías. Metros más adelante de nuevo la neblina se adueña de nuestro camino. Ahora se siente más frío pero al menos ya hallé la manera de limpiar la mica de mi casco sin que mis lentes se llenen de gotas de agua. Pasamos por Nombre de Dios a las 9a.m. aún con la neblina y el Motoso llega a a comprar algún mezcal de ese mismo que probaron Almighty, Jorge y Alex en la Media Luna.
El plan era llegar a Vicente Guerrero a desayunar, pero como aún hay neblina y no tengo una clara idea de donde podríamos hacerlo decido continuar hasta Sombrerete. Algunos metros delante de Vicente Guerrero la neblina ya ha desaparecido, pero el frío aún es intenso y traemos los guantes mojados así que mis manos van frías, muy, muy, frías. Por algunos momentos incluso creo que voy pasando más frío que en el regreso de la última rodada a Mazatlán. El camino hasta aquí ha sido recto, la mayor parte del tiempo de dos carriles en doble sentido con sus acotamientos. En algunas partes los automovilistas circulaban a exceso de velocidad aún con la presencia de la neblina… Si alguien me habla de irresponsabilidad yo les hablaré de ellos. Ya en territorio zacatecano aparecen algunas curvas suaves, creo las más memorables en todo el camino de Durango hasta Zacatecas. Casi siempre el motoso y yo íbamos al mismo paso, excepto de pronto cuando me aceleraba un poco y lo dejaba atrás, pero en general íbamos juntos, en estas curvas me doy cuenta que tan precavida es su forma de conducir, ya que si yo me considero prudente y hago mis rebases con precaución el se toma aún más espacio para hacerlo y según veo no lo hace con prisa, jamás se precipita. Hay bastante que aprender de él. Nos detenemos en algún pequeño restaurant justo antes de la desviación que va a la Sierra de Órganos ya que el frío que siento en las manos es demasiado, llego por un café al restaurant y seguimos el camino.
Casi llegando a Sombrerete hay un tramo de una larga recta con varias crestas y columpios, nos aproximamos a dos camionetas y las adelanto fácilmente, primero una, luego la otra. Más adelante la que iba adelante de pronto ya va leyéndome las placas, no se porque hace eso, si antes iba muy lento, no se si le caló que una moto lo haya adelantado o que pasó. Así seguimos, aún lo traigo pegado atrás de mi pero no me adelanta. Tomamos una larga bajada que incluye una curva muy abierta y yo no disminuyo la velocidad, la tomo como lo haría normalmente y en ese punto la camioneta si frena, disminuye su velocidad. ¿Porqué si antes venía tan cerca de mi, en la curva ya no lo hizo? No entiendo…
Llegamos a Sombrerete, un sitio que Motoso quería conocer y que yo sólo había visto de pasada ya sea sobre la DR o sobre un Ómnibus de México. Siguiendo el señalamiento llegamos a el centro y buscamos algún lugar para desayunar, finalmente nos dirigimos rumbo al mercado y por casualidad encontramos La Cúpula Restaurant. Ampliamente recomendables sus desayunos. Muy bien servido, buen sazón, buen servicio, al menos para dos viajeros hambrientos como nosotros superó la expectativa luego de que no encontrábamos un sitio que nos invitara a comer ahí.
De Sombrerete podemos decir que es un pueblo colonial muy bonito, con mucho que ver y conocer, ya que en nuestro corto rodar por su centro vimos tres iglesias con sus plazas y varias construcciones dignas de ser admiradas.
Nos dirigimos a la carretera. Ha llegado el momento de que Motoso continúe su camino a casa. Afortunadamente parece que el clima le favorece y ya no se ven más nubes a eso de las 12pm que nos despedimos. Un gusto amigo tenerte por estas tierras y haber rodado de nuevo juntos.
Regreso rumbo a Durango pero paso a visitar la Sierra de Órganos. Ya había estado en este lugar hace unos 8 años aproximadamente. A la entrada pago mi cuota personal de acceso de $20 módicos pesos. Desde que venía por la carretera pavimentada de acceso a este lugar venía viendo las particulares formaciones rocosas que le dan nombre al lugar. Adentro el recorrido consiste en un camino de terracería en bastante buen estado, buena infraestructura turística con asadores, palapas, áreas de acampado, zonas de estacionamiento, señalización, etc. Algo que me llamó la atención son las obras de protección contra erosión que se han instalado. Se ve que en verdad el Gobierno de Zacatecas está cuidando el lugar, incluyendo algunas zonas de acceso restringido que ya no pude conocer.
El ambiente es de gran tranquilidad, invita a pasar un rato leyendo sin interrupciones, simplemente meditando o charlando con buena compañía. También acampar en una fría noche de un invierno como éste con luna llena sería una gran experiencia.
Salgo de la Sierra de Órganos y tomo de nueva cuenta la carretera Zacatecas – Durango, ahora el clima es completamente soleado, aún ligeramente fresco pero nada que ver con lo que vivimos por la mañana. Paso por Vicente Guerrero, luego Nombre de Dios donde veo un par de motociclistas en sus choppers hablando en un teléfono público, los saludo a mi paso y me corresponden.
Llego a cargar gasolina y continúo sin más incidentes que comentar hasta llegar a Durango casi a las 3p.m. Esta rodada no hubiera sido posible sin el Motoso que finalmente y sin planearlo vino a visitar la tierra de los alacranes. Espero haya sido de su agrado el viaje y que haya quedado con ganas de regresar. Aún tiene pendiente conocer lo mejor de mi estado: ¡la sierra! Un mensaje para la demás banda de MotoRutaMexico.com: Durango los espera con los brazos abiertos y espero no con tanto frío jeje.
Distancia total recorrida: 298km principalmente en carretera
Fin
PRIMIS!!!!! mejor titulo no hay Aaron al rato lo leo con calmita para desvirtuar 🙂
Gracias motoso, pero ahora queda pendiente ¿que título le pondrás a tu relato? Además quiero leerlo de una vez para aclarar dudas jeje
PRIIIIIIIMIIIIISSSSSSS EL ANTERIOR COMENTARIO NO SURGE EFECTO… JEJEJEJ
Al ver el titulo “Motosito conoce Durango y su Frío”, me imagine que ya por fin teníamos un post de Motoso, pero sorpresas es de Aarón. Haber motoso dinos de que se trata? Hasta cuando subirás un relato?
Ahora sí, vamos a opinar como Dios Manda.
Andrés esa pinche tenacidad que tienes pa rodar me sorprende, recuerdo cuando llegaste a Toluca en menos de seis horas, también me llega a la mente los días siguientes y la rodada de Querétaro – Chilpancingo capital de Guerrero y ahora decides rodar un aprox de 20 hrs en tu Bros, en condiciones que no veremos rodar al típico “motociclista” que no saluda, que solo postea en motolatas, al típico farsante que por tener moto grande ya se siente todo un Zeus, cada día me sorprende mas el hecho de ver y saber hasta dónde llegaremos, porque después de saber nuestros límites, al menos los que hasta ese día conocemos ya estamos pensando cual será la próxima, más larga, mas cansada, mas disfrutable, más curvas, más sol, más lluvia, más viento, más pueblos por conocer Andrés muchas felicidades por tu rodada y esperamos pronto tengas tu “POST”
Aarón se observa, se lee que eres buen anfitrión, algo que no me gusta de este tipo de rodadas es que te pasas más tiempo arriba de la moto que al lugar que visitas, sin embargo a esta altura del partido cualquier ruta se disfruta.
Con respecto a lo de la camioneta que va lento y la rebasan y después se pega a leer placa, sabemos que es alguien con un complejo de inferioridad altamente grandes, el que lleguen a la curva y este amigo no siga pegado leyendo placa bueno tu y yo sabes que no se siente lo mismo una curva a 80km/h en tu DR que en una Ford F150, seguramente los centros de gravedad son diferentes, en la moto vas como si nada pero en la camioneta de seguro sientes que la parte trasera se te va, contemplando y sabiendo esto antes mencionado, es por lo que muchas veces me pongo hacer mis rebases en rectas que le precede, continua, le sigue una curva, porque al menos se que puedo tomar esa curva más rápido pero sobre todo porque se tendrá que bajar la velocidad.
Mi buen Aarón a finales de este mes sabre si voy con “mochila” o no hacia Durango todo hace indicar que si y probablemente este viaje se convierta en un viaje de 15 días aun no lo sabemos pero ya quiero que sea Semana Santa.
Ya por ultimo Motosito, ponte las pilas, deja de salir un domingo, no tomes el sábado, desayúnate bien y mi amigo Motosito ponte a subir todos esos post que tienes en tintero queremos saber de ti y haber que vamos haciendo en semana santa…. Y Motosito Diciembre me gusto pa que te fueras…
Algunos días después el Motoso se puso las pilas y ya tiene dos relatos que aún ni he leído jaja…
Al igual que tu yo también me sorprendí de este viaje que realizó Andrés, ya que era bastante largo, el clima no le favorecía nada y menos cuando el mismo día que venía viajando me metí a alguna página de pronóstico del tiempo y vi que todos los estados por los que pasaría estaban cubiertos de lluvia, además de que el mismo me lo confirmó con un mensaje e incluso le ofrecí conseguirle donde quedarse en Zacatecas si fuera necesario… Incluso el tramo que lo acompañé de verdad por momentos sentí ganas de mejor abortar la rodada y dejarlo que se fuera, pero me dije si a el le faltan unas 4 o 5 horas de esto mismo yo también puedo! jeje lo bueno que desde kilómetros antes de donde nos despedimos el clima mejoró y ya no se veían nubes.
No creo ser buen anfitrión, pero bueno, ya lo comprobarás en semana santa cuando andes por acá… El complejo de inferioridad del de la camioneta! jaja, lo mismo llegué a pensar es que no se, no se vale, digo si al principio iba lento está bien, si luego se molestó porque lo rebasé pues que el haga lo mismo y tan fácil, ¿no?
Entonces por acá nos vemos Almighty, serás bien recibido con o sin “mochila” jeje
Saludos
¡Están locos, LOCOS! Rodar a 0ºC con la velocidad que agarran equivalen a unos 5 o 6ºC bajo cero, tal vez menos. ¡Ah, lo que es ser chavo!
Primero que nada, ¡FELICITACIONES! Esa rodada pocos, muy pocos las hacen. Hasta los gringos con sus inviernos tan locos, prefieren guardar las motos durante toda la temporada, y las vuelven a sacar allá por Marzo. Ustedes, canijos, les ponen el ejemplo.
🙂
Buen relato, un poco corto, tal vez, pero se complementará con el de Motoso.
¿Fotos? “Frente a las Gorditas” es una clásica. Foto que impresiona. Las de la neblina tambien muy buenas. Las de los cerros tan raros, y el cerro en Sombrerete… Caray, casi todas estan para guardarse.
Nuevamente felicitaciones, y mis respetos a los dos.
Saludos desde Reynosa.
macnifico
…
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Lo mismo pensé: ¡PAR DE LOCOS! pero bueno, tenemos que aprovechar mientras tenemos esa condición, ¿no? jeje por cierto, que tan lejos te queda Cuatrociénegas de Reynosa? Tengo posibilidades de ir por allá igual para saludarnos jeje
Gracias por tus comentarios de las fotos, creo que más que nada se deben a la espontaneidad que he tomado últimamente y a los buenos consejos de Tere.
Saludos Macnifico!
Aaron, buen relato yo ya dare mi punto de vista en otra oportunidad, mientras tanto solamente me queda agradecerte la hospitalidad y amistad brindada sin la cual el motoso seguiria sin conocer Durango.
ahh espero volver a verte en el camino…:-)
Haber momento, momento…. como que ya en otra oportunidad y eso cuando es? no sea como lo de la motofiesta porque nts ya valio pa 2 cosas jeje.
Si el de la motofiesta no a visto la luz es por los problemones que tiene la pagina y el admin no quiere admitir, el archivo ya va para tres semanas y nada que se publica, aclarenos por que marca el error al importarlo sr. admin por favor y no diga que soy yo el que no chambea.
Awanta las carnitas papa…
jeje no pasa nada, ya hay dos relatos del motoso recientes!
Por nada motoso, ya sabes acá tienes tu casa cuando gustes y bueno, esperamos no tu punto de vista sino tu relato del gran viaje que hiciste.
Saludos! La cita es en Durango en Semana Santa jeje